Buenos días, recibe un cordial saludo y te pido por favor que intérpretes este sueño que ha marcado mi vida. Estuve hospitalizada y durante ese tiempo tuve una pesadilla terrible: soñé que llegaba un espíritu del mal y se colocaba detrás de mí como en cucharita. Sentí cómo se satisfacía y le dije: «puedes tomar mi cuerpo pero no mi alma» e intenté hablarle, nombrarle a Jesús para que se fuera. Quería decirle «Jesús de Nazaret» pero no podía, ese espíritu no me dejaba. Cuando intenté decírselo, me soplaba y era como que se burlaba. Después lo miré y él estaba acostado, de blanco, como en la cima de una montaña, algo así como el mirador de una ciudad y se reía. Yo entendí que si lo adoraba iba a ser dueña de todo. Él estaba tirado en el piso y se sonreía. Yo le dije: «jamás, jamás, Jesús de Nazaret, despiértame» y me desperté. Lloré mucho y le clamé a Dios por ese sueño porque no quiero ni que mis sueños que el mal me toque. Sentí como si de verdad él me hubiera hecho daño.
PATRICIA, ¿Quién es perfecto? ¿Quién es un santo? ¿Quién es un mártir? Es muy bueno que quieras ser una buena persona y trates de mejorar. Todos nos hemos equivocado, todos hemos pecado. Nuestra fe en Dios y el saber que existe la redención nos ayudan a continuar. Debes comprender que tener sexo, en sí mismo, no es un pecado. La relación pecaminosa se da dependiendo de las circunstancias. Las imágenes de tu sueño hablan de un sentimiento de culpa que debes superar. Las tentaciones, a veces, nos superan. Pero lo importante es regresar al camino correcto.
Bendiciones,
Candy