Señora Candy disculpe, empecé a sentir una inquietud y quiero a ver si usted me puede ayudar. Estoy en Venezuela en la cual estamos pasando situaciones muy pero muy difíciles, mi mamá murió el 07 de mayo, yo sentí que ella se iba poco a poco y seguí hablándole. Dejó de respirar y yo, llorando, le dije Dios gracias por mi mamá y ahora ¿qué hago? ¡Ay!, no entiendo nada Dios. De repente busqué y la pinté, la maquillé, le arreglé el cabello, le pinté las uñas de las manos y pies, le puse crema, la arropé. Eran como las 11.30 pm, apagué las luces y me fui acostar a las 4.00 am. Sentí que mi cuerpo temblaba, no teníamos luz, ya la habían quitado, más de diez horas sin luz eléctrica, imagínese. A las 7.00 am llegó la luz, volví al cuarto y revisé a mi mamá. Le dije “mamá, mamá, ¿tú de verdad te fuiste?, no me dejes mamá” y sentí una brisa, entonces entendí que ya no podía hacer nada si Dios se la había llevado. Le comenté a la gente y nadie sintió el temblor, la gente me decía “¿qué es eso Mora?, no ha pasado nada, si hubiera temblado alguien más habría sentido el temblor y ningún vecino gritó”.
MORAIMA, la experiencia que viviste fue muy especial. Acompañar al espíritu de tu madre antes de pasar al plano espiritual es una oportunidad que no todas las personas pueden tener. Tu calma y fortaleza al arreglar su cuerpo y al mismo tiempo tu sensibilidad para comprender la situación y darle gracias a Dios por la madre que tuviste, demuestran que entendiste que había llegado la hora para que ella abandonara su cuerpo. La sensación de temblor y el soplo que percibiste fue la presencia del espíritu de tu mami tratando de decirte que seguía a tu lado. Fue una forma de ella manifestarse físicamente. Con seguridad aparecerá en tus sueños para seguir guiándote y protegiéndote.
En mis oraciones están siempre todos los venezolanos para que superen pronto la situación tan difícil que están atravesando.
Un abrazo